ACTITUD

«Todo puede ser tomado del hombre menos una cosa: la última de las libertades humanas – elegir la actitud de uno en cualquier circunstancia dada, elegir el camino propio»

Viktor Frankl

Nuestra actitud es una decisión. Nosotros decidimos como vamos a actuar e interactuar con quienes nos relacionamos cada día, cada instante.

En el día a día:

  • …no se va a dar cuenta dale no más…DECIDO ENGAÑAR A ALGUIEN
  • …de aquí no me muevo hasta que ese animal deje de tocar la bocina…DECIDO INCENTIVAR EL CAOS
  • …hoy hago la proyección financiera para aliviarle la carga laboral a mi analista, ha sido una semana muy recargada…DECIDO SERVIR DESINTERESADAMENTE POR EL BIEN DEL OTRO
  • …métele el carro todos son unas bestias manejando…DECIDO INCENTIVAR EL CAOS
  • …carga el mototaxi no más, una camioneta nos va a salir muy caro…DECIDO ARRIESGAR MUCHO POR POCO
  • …oe bajo en la esquina…DECIDO NO USAR MODALES
  • …haz hueco en la arena y mete el pañal, el mar se lleva todo igual…DECIDO DESTRUIR EL PLANETA
  • …otra vez hijo, no ves que estoy ocupado…DECIDO NO SABER PRIORIZAR LO QUE REALMENTE IMPORTA
  • …voy a llevar estas flores porque sé que a mi esposa le alegran la vida…DECIDO ALEGRAR A ALGUIEN

No podemos negar que nuestra actitud es nuestro comportamiento y está influenciada por nuestros conocimientos y emociones.

En Wikipedia encontramos que, basándose en diversos conceptos de actitudes, se ha definido la actitud como una organización duradera de creencias y cogniciones en general, dotada de una carga afectiva en favor o en contra de un objeto definido, que predispone a una acción coherente con las cogniciones y afectos relativos a dicho objeto.

Entonces nuestra forma de actuar, nuestra actitud, está en función de las experiencias que hayamos vivido, de donde se han ido formando nuestras creencias y conocimientos, y también en función de nuestras emociones, de nuestro estado de ánimo en determinado momento. Siendo la actitud una decisión, compuesta por los factores antes mencionados ¿por qué no todos decidimos vivir en armonía, en paz, en conciliar en vez de confrontar? ¿por qué no todos tenemos una actitud que sume y que signifique un cambio positivo día tras día para nosotros y todos los que nos rodean?

Pues simplemente porque no queremos o porque no sabemos decidir o porque las emociones nos ciegan o porque el ego nos gana (mínimos detalles que pasan desapercibidos pero que pueden tener consecuencias lamentables).

Un ejemplo fresco lo tenemos en lo acontecido en la política peruana en los últimos 2 años y medio, donde claramente se ha podido ver como una actitud conspiradora ha mantenido al país casi paralizado, gastando fuerzas, recursos y TIEMPO en dejar claro quien tiene el poder, si Yo no puedo tú tampoco, en tapar la corrupción. Triste pero cierto, o sea, para estos señores el ciudadano, el pueblo peruano, les importa un comino, sólo están concentrados en cómo ganar más dinero a costa de lo que sea y limpiar su nombre para no terminar preso, el resto les vale madre. Entonces, la actitud de la mayoría de los políticos peruanos, que por los hechos que ahora conocemos y que evidencian el real comportamiento de estos señores, es una clara decisión día a día de pensar en sus beneficios personales antes que los del pueblo peruano. Esto es un ejemplo generalizado, creo que sí hay políticos con actitud honesta en el Perú, pero el nivel de corrupción del cual somos testigos todos los peruanos en este momento me lleva a la conclusión que debe hacerse una reingeniería de la actitud en el estado peruano, la cual podría ser impulsada con nuestra actitud como peruanos honestos en el día a día.

Sólo para aclarar, no tengo inclinación política alguna, pienso que ser parte de un partido político es actuar bajo un código impuesto y mi código es el bienestar de nuestro planeta, de nuestra sociedad, el equilibrio, sin preferencias, ni colores, ni distinciones.

A lo que vamos es que, si bien es muy fácil decir a partir de ahora voy a tener una actitud positiva por mi bien y el del mundo entero, lo difícil viene al ponerlo en práctica, ya que primero debemos preguntarnos qué tan bien tomamos nuestras decisiones, segundo qué tan bien nos conocemos, y tercero qué tan bien está nuestro autocontrol.

Así que ya sabes, todo depende de cada uno de nosotros, la próxima vez que tu hijo quiera hablar contigo y estés muy ocupado, pregúntate si esa hora que le puedes dedicar y que implicaría trasnocharte un par de horas más, no serviría para darle la seguridad emocional que lo acompañará en su futuro para afrontar mejor los problemas que se le presenten, o simplemente piensa en lo afortunado que es tu hijo de tenerte cerca y que pueda contar contigo.

Y esta historia de poder ser mejores nunca acaba, así que los próximos cambios positivos estarán orientados al autocontrol y la toma de decisiones.

¡Buenas vibras!

Anuncio publicitario

2 comentarios sobre “ACTITUD

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.