MENTE SURF, MENTE AZUL

No hay nada en la vida como las gratas sorpresas, y para un amante de la lectura, que te sorprendan regalándote un libro que tenías mapeado adquirir en algún momento, más grato aún.

Es así como llegó hace unas semanas el libro “Blue Mind” a mis manos, el cual estoy todavía leyendo, pero me topé con una parte a mitad del libro que necesitaba compartirla por que es el sustento de mucho de lo que vengo escribiendo al respecto en el presente blog.

El libro está centrado en el agua como elemento primordial para nuestro bienestar físico, mental y espiritual, basándose en diversos estudios y hechos científicos, los cuales hacen la lectura bastante técnica en general, pero muy útil para quienes estamos en búsqueda de explicaciones que aumenten nuestro nivel de conciencia sobre el surf, deporte en el que estamos dentro y sobre el océano.

El libro nos da argumentos para sustentar algunas creencias, de las cuales como surfers somos testigos porque las sentimos (la buena vibra que produce el surf), pero que no sabemos cómo explicarlas, e incluso usarlas. Como podrán leer en el siguiente fragmento que les comparto: https://cambiopositivope.files.wordpress.com/2021/02/menteazul.pdf, el autor nos deja ver, con el caso de su amigo Van,  que si dicha energía no es bien interpretada y canalizada, podría llevarnos a buscarla en hábitos autodestructivos; sin embargo, por el contrario, podemos ver en la transformación de Van y en la historia de Farhana, el bienestar que les genera, así como la motivación de lograr que otros puedan vivir la misma experiencia, usando esa energía para ser mejores personas, lo cual es sumamente gratificante.

El libro considera a los surfers como ejemplo de una mente azul, lo cual conlleva, no sólo saber aprovechar los beneficios que nos brinda el océano, un elemento tan importante para mantenernos con vida y del cual todavía somos ignorantes en muchos aspectos, o es lo que parece por el daño que le venimos ocasionando; sino también la gran responsabilidad de cuidarlo y protegerlo.

Como resumen, reafirmo mi creencia que la práctica del surf puede servir de terapia para nuestro cuerpo, mente y alma. Como testigo de dicho cambio positivo, quedo satisfecho con las evidencias expuestas en el libro, así como con la suficiente inspiración para seguir curioseando al respecto, aprendiendo y, sobre todo, compartiendo…generando más cambios positivos.

¡Buenas vibras!

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